¿Ha oído el dicho “prepárese para lo peor y espere lo mejor”? ¡Hay mucho de cierto en esto de la gestión de riesgos!
La gestión de riesgos consiste en planificar lo peor para estar preparados, en caso de que ocurriese. En eso consiste la resiliencia jurídica, en la capacidad de su explotación agrícola o ganadera para recuperarse tras las consecuencias.
Recuerde: Planificar es traer el futuro al presente para poder hacer algo, al respecto, ahora.
En la gestión de riesgos se empieza por imaginar lo peor que podría ocurrir y, a partir de ahí, se elabora un plan de gestión. En general, esto es lo que se hace al crear un documento de gobernanza. Está creando un proceso para hacer frente a las cosas pesadas de la vida en lo que se refiere a su negocio (muerte, divorcio, disputas, incapacidad y deudas), así como a las cosas más cotidianas (contribuciones al negocio, remuneración, toma de decisiones, reuniones, funciones y responsabilidades).
El primer paso para redactar un documento de gobernanza es definir la constelación de “cosas peores” que desee gestionar.
Se trata de un ejercicio eficaz, que puede realizar junto con su(s) socio(s) comercial(es).
¡Bien hecho! No ha sido una tarea fácil, pero es importante, ya que se está estableciendo una línea de base para las cuestiones que el documento de gobernanza ayudará a gestionar. Ahora, cambiemos la perspectiva hacia dónde quiere ir y cómo quiere dar forma a ese camino en el Paso 2.